7.La llegada al parque:

Cuando llegamos allí, me condujo a una explanada de hierba con flores y nos sentamos.
Me dijo:
-Bueno, como bien sabes hoy te he traído aquí para declararte mi amor, y para que me digas si quieres ser mi novia o no.
-¡Pues claro que sí!

En ese momento me cojió y me besó, entonces me sentí en mi mundo, mejor que nunca.
Después me llevo a un restaurante cercano y allí cenamos.
A continuación fuimos a la playa allí casi nos enrollamos pero al final no paso nada,menos mal.
Vuelta  a mi casa nos volvimos a besar y sentí una cosa que era inexplicable pero maravillosa.

6."La cita":

Bueno, al día siguiente me levanté a las una de la tarde.Mis padres ya estaban preparando la  comida de al mediodía.
Mientras ellos la preparaban yo me senté en el sofá a pensar que le iba a decir a Iván, le dí mil vueltas a la cabeza, estuve a punto de tomar la decisión y decirle que no, porque no me atrevía a que me pasase con él lo mismo que  me pasó con Rafa.(La anterior historia, no se si recordáis aún).
Luego, comí rápido para ir a arreglarme.Me puse un vestido nuevo, unos zapatos con un poco de tacón y nuevamente me ricé el pelo.  
Esperé a que llegase Iván, a los veinte minutos de estar esperando, alguien tocó a la puerta y era Iván.Me llevó hacia un parque muy bonito, pero en todo el camino no me dijo ni "mu", se le notaba bastante nervioso igual que a mí.
Él estaba guapísimo, llevaba una camisa azul celeste, unos vaqueros, unas converse azules y se había peinado con sus pelo de punta, ¡valla guapísimo!
Anduvimos un rato y llegamos al parque.

5.¡Que fuerte, no me lo creo!:

Comenzó a hablarme:

-Andrea,¿tienes un momento?
-Bueno,sí.¿Qué quieres?
-Quería decir una cosa que siento desde el día en que te conocí.
-¿Y qué es lo que me tienes que decir?(Yo ya me imaginaba lo que me iba a decir).
-Pues...
-¡Mira Iván dímelo ya, que me estoy poniendo nerviosa!
-¡Que te quiero!
-¿Enserio?¿No estarás bromeando?
-Que no, que es enserio, que te quiero desde el primer día en que te conocí.¿Quieres ser mi novia?
-Iván,¿qué te parece si quedamos mañana por la tarde y así tengo tiempo para pensármelo?
-Está bien, mañana a las cinco en la puerta de tu casa,¿ok?
-Okey, adiós que yo ya me voy. 
Él me dio un beso en la mejilla y se fue.

4.La cosa se empieza a calentar =):

Baile bastante rato hasta que me dí cuenta que alguien me estaba observando,¿y sabéis quien era? Pues Iván.
Me puse roja e Iván se dio cuenta, entonces decidí ir corriendo al baño y encerrarme allí un rato, para que así  Iván no se diese cuenta todavía más de que me daba vergüenza que me  mirase.
Cuando ya pasaron unos veinte minutos salí de allí, pero para mi sorpresa en la salida me estaba esperando Iván, en aquel momento no sabía que pensar, pero me dije a mi misma:
"Andrea, no te ataques de nervios y sé tu misma".
Y así lo intente, pero no me dio mucho resultado cuando llegue allí e Iván empezó a hablarme.

Vuelvo a escribir y continuo la historia empezada.

3.Noche vieja: 

Y sin darme cuenta pasaron los días y llegó esa noche tan esperada. A las siete y media empecé a ducharme, peinarme, vestirme..etc

Cuando terminé eran las nueve y era hora de irse a un restaurante donde íbamos a cenar con unos amigos de mis padres. Llegamos allí y comímos unos deliciosos platos.Cuando terminamos de comer nos fuimos a casa de los amigos de mis padres a tomar las uvas.

Cuando íbamos a empezar a tomar las uvas todo iba bien hasta que con la cuarta uva me entró la risa y casi me atraganto, pero al final me dio tiempo a tomarme todas las uvas.

Luego para celebrarlo nos fuimos a una discoteca cercana muy chula, donde ponían música actual y moderna.

Allí me encontré en el baño a Iván un amigo mio, mayor que yo, que conocí un día dando un vuelta con mis amigas.Lo saludé:

-Hola Iván.

-Hola,¿qué tal?

-Bien,¿que haces por aquí?

-Con mis padres y unos amigos celebrando el año nuevo y sobre todo feliz por a verme encontrado contigo,por cierto,estas guapísima con ese vestido.

-Jajaja, gracias, tú, como siempre tan caballeroso. Bueno, adios.

-Adios princesita

Me quedé pensando un rato en los piropos que me echó Iván y después seguí bailando.